Experimentando nuevas sensaciones con lápices y pasteles blandos, dejando descansar el aerógrafo.

lápiz y pastel blando

AUDREY...DE NUEVO

Probando nuevas texturas.

Lápiz y pastel sobre papel de periódico encolado en táblex.

BOOP-OOP-A-DOOP

SOBRE MIEDOS Y TRISTEZAS

   Entreabrí la puerta medio dubitativo y temeroso, oxidados chirridos componían una tediosa y prolongada melodía de violines desafinados. En las paredes, encorvadas estanterías soportaban aún el peso de los abigarrados y cargantes libros que, pacientes, esperaban desplegar toda su retahíla de conocimiento sobre el primero que los destaparan. Fui directo al baúl, el que estaba junto a la cama y que servía a la vez de mesita, señal inequívoca de que pocas veces se abría. Retiré con sumo cuidado la lamparilla de noche, un reloj de pulsera y un tubo gastado de ungüento. Respiré hondo tragándome el polvo que pululaba por el aire. No le di importancia. Escudriñé en su interior en busca de la causa de mis miedos y tristezas pero no encontré nada, solo veladas imágenes de mi infancia, notas musicales, olores a campo y colores ocre. Nada más. Desperté sobre el diván con una sensación de vacío, el psicólogo tenía su cabeza orientada hacia sus apuntes pero con su mirada clavada en mi rostro. Tal vez la próxima vez tenga más suerte. Tal vez la próxima vez abramos alguno de aquellos vetustos libros. Tal vez.